El martes 15 de mayo la empresa multinacional Kellogg decidió cerrar sus instalaciones en Venezuela. El gobierno de Nicolas Maduro tomó el control de las sucursales de la empresa estadounidense y dar el control a los empleados luego cesara sus operaciones por el acelerado deterioro económico del país.

Durante un acto de campaña para las presidenciales del domingo, el mandatario Nicolás Maduro dijo que las autoridades reabrieron la planta y producirá en manos de «la clase obrera».  Maduro denunció ante sus simpatizantes que el cierre busca «asustar al pueblo». Los comicios del 20 de mayo no se reconocerán Estados Unidos, la Unión Europea y varios países latinoamericanos.

«¡Imperialistas, oligarcas, a este pueblo no lo asusta nadie! Este pueblo tiene un presidente y un gobierno que lo protege», lanzó en medio de aplausos, y añadió que pedirá una orden de captura internacional contra los dueños y accionistas.

El jefe del Ejecutivo anunció que el Gobierno va «a iniciar las acciones judiciales para solicitar el código rojo (de Interpol, el mayor nivel de alerta) para los dueños, accionistas de la empresa Kellog, para que paguen en los tribunales».

Maduro advirtió que iniciara las acciones judiciales para solicitar el código rojo de Interpol, el mayor nivel de alerta para los dueños, accionistas de la empresa Kellog, para que paguen en los tribunales. «El deterioro de la situación económica y social ha obligado a que la compañía detenga sus operaciones y salga del país», anunció en un comunicado la firma, que cubre 50 % del mercado venezolano. Añadió que «todos los activos, compromisos y garantías legales han sido cubiertos por Kellogg a favor de sus empleados, clientes y proveedores».

Aunque la firma dijo que la distribución de productos y el uso de la marca quedan suspendidos, Maduro enfatizó que «Kellogg va a seguir produciendo» y que el cierre es ilegal.  Las multinacionales lidian con millones de dólares de pérdidas ante un caos económico en el cual la moneda local, el bolívar, se ha devaluado 95 % desde febrero.